Ángel Haniel
Evocar al Ángel Haniel
Ángel Haniel
se evoca para todo lo que tiene que ver con el tema del amor divino e incondicional. Este ángel es regente de las virtudes de la belleza y el amor divino, y es por eso por lo que a veces es confundido con el Ángel Chamuel.
Haniel recibe su nombre en honor a Venus, la diosa del amor. Además, representa la idea de energía victoriosa y el dominio a través de los emociones y sentimientos del amor. Siendo portadora de la alegría, el bienestar y la felicidad, ha sido representada llevando en sus manos una lámpara, iluminando su entorno con su luz, sin importar la oscuridad opaca de las circunstancias que se presentan.
Haniel está relacionada con el Ángel que transportó a Enoc a los cielos. Haniel es regente del coro de los Principados. Ellos son los encargados de proteger naciones, ciudades y reinos. Son ellos quienes, al igual que Jesucristo, manifiestan el dominio de Dios sobre la naturaleza.
MEDITACIÓN CON HANIEL
Es crucial que antes de invocar y hacer un ritual con Ángel Haniel, limpiemos nuestro entorno para que esté libre de energías de baja vibración. Que esté completamente limpio, sin energías negativas, que generalmente pueden acumularse por motivo de las preocupaciones cotidianas, e inclusive de la conciencia colectiva. Procedemos, así mismo, igual que con cualquier otro trabajo con la magia angelical.
Hacer un ritual
ORACIÓN A HANIEL
“Haniel, llena de gracia,
trabaja para que la belleza de la Tierra sea eterna.
Para que mis pedidos, mi verdad, sean alcanzados con gracia y dulzura.
Haz que, en esta vida, todo lo que es necesario sea utilizado con sabiduría, modestia y humildad.
Hazme noble de carácter, en hablar, trabajar y en toda mi extensión.
Haz de mí una persona optimista y en condiciones de tomar siempre partido por lo positivo.
Poder sentirme seguro para realizarme en el amor, con toda la fuerza de los ángeles y guardianes divinos.
Haniel, con amor te saludo!
Que este amor resplandezca y brille en mi ser,
en mi hogar, en todas las ocasiones y detalles frente a mi vida.
Que triunfe sobre los obstáculos; que tu gran rayo de amor me ilumine como un diamante y me bendiga en cada segundo de mi existencia.
Amén”.
¡Luz y amor en tu caminar!